LOS RECUERDOS
Esparcí las cenizas de los recuerdos
en el mar aquella noche,lo decidí.
Pero con las olas al viento volvieron
los recuerdos golpeando mis pies.
Esos recuerdos que se querían quedar
y yo pobre de mi quería olvidar.
Volví a lanzar con fuerza aquellos
mas feos,que me produjeron dolor,
pero entonces una voz saliendo del mar,
me dijo: No es cuestión de olvidar
si no recordar sin hacerte daño.
Y en su sabiduría el mar me hizo entender.
Entonces empece a entender y recordé
primero aquellas cosas no gratas para mi
y me quede no con el dolor ,con el aprendizaje
y después sonriente y feliz,recordé los momentos
alegres,aquellos que jamas se olvidan,que quieres
mantener en tu mente y enganchar en tu retina.
Y así el mar nuevamente me enseño
que nada se olvida,ni lo malo ni lo bueno,
que nuestra mente recuerda cada vez
menos dolorida y más agradecida,
que la vida es recuerdo y recuerdo somos
en la vida de otros,que nos amaron o tal vez no.
